Como el conejo de Alicia, un niño me lleva a los huecos de mi propia historia y se aleja para dejarme en la infancia. Recorro los espacios que me vieron crecer, las personas y sus objetos. Escenas que aparecen como flashes de aquello que nos une: la casa y la familia.
El gesto ilusorio del tiempo es quien nos habita.
Fotografío para recordar.
Fotografías realizadas con diapositivas vencidas.